Más que un juego.

 Todo esto es como cuando te regalaban un juguete nuevo, al principio jugabas con él a todas horas, te peleabas por tenerlo. no se lo dejabas tocar a nadie, pero al poco tiempo te cansabas y lo olvidabas, lo guardabas en el fondo del armario cogiendo polvo para sacarlo muchos años después recordarlo. Tenias tantos que te acababas cansando de todos y todos iban a parar al mismo sitio, el armario. Siempre acabas con el mas viejo, al que mejor conocías, junto con el que habías pasado los mejores momentos, también habíais pasado juntos las mayores ciadas de las que siempre te levantabas, el que te había roto tus ilusiones una y otra vez cuando desaparecía de tu lado y por que más lágrimas has soltado, al que mas cariño le cogiste y al que siempre tendrías a tu lado. Cuantos más juguetes nuevos aparecían mas recordabas y querías al viejo.